Redacción.- El dirigente del Movimiento Ciudadano por el Agua, Adalberto Rosas López, declaró que desconoce que se haya hecho una propuesta en la que presumible-mente el Gobierno Federal y el gobierno de Sonora, realizarían acuerdos para atender el conflicto propiciado por la ilegal construcción del Acueducto Independencia. Sostuvo que la unidad del movimiento en defensa de las aguas del Río Yaqui se ha mantenido por cuatro años como resultado de que todos, esto es productores rurales, presidentes municipales del Sur de Sonora, organismos empresariales y la ciudadanía en general, nos hemos reconocido en la defensa de la ley y del Estado de Derecho.Nadie debe de olvidar, dice el ex alcalde de Cajeme, que el martes 28 de mayo, más de 30 mil ciudadanos de los municipios del Sur de Sonora, nos respaldaron con voto a mano alzada para que emprendiéramos las acciones de resistencia civil. La encomienda del pueblo fue clara: defiendan la ley y el Estado de Derecho y que el Gobierno Federal aplique la ley y detenga el robo de aguas nacionales que realiza Guillermo Padrés.
El pueblo no nos mandó a negociar, ni tampoco a darle crédito a un gobierno corrupto y mentirosos como el de Guillermo Padrés, sostiene Rosas López.
El Movimiento Ciudadano por el Agua, se mantiene firme en que la solución verdadera a este problema tiene que darse por el camino del respeto a la ley y con una política de gestión de más agua para Sonora y para México.
Respetar la ley, quiere decir, explica Rosas, que PROFEPA ya debería de haber notificado al gobierno de Sonora que la obra del acueducto, carece, por sentencia de la Corte, de Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA). La consecuencia administrativa y legal, es que la operación y construcción del acueducto se debe de detener, sin mayor mediación, más cuando sabemos que la Ciudad de Hermosillo, puede superar su emergencia estacional con otras acciones de abastecimiento de agua.
El Movimiento Ciudadano por el Agua, no va renunciar a la exigencia de que se respete la ley, afirma Rosas López, y luego sentencia: no vamos cambiar nuestra convicción de que se proceda de acuerdo a Derecho, avalando presuntos acuerdos y promesas de un gobierno que nos ha atropellado y que ha desacatado al Poder Judicial de la Federación.
Nosotros vamos a la ofensiva, dice con optimismo el líder del Movimiento Ciudadano por el Agua: “el amparo otorgado por la Suprema Corte a la Tribu Yaqui, es una acción legal que nos protege a todos”, eso es lo que quiere decir, explica, la declaratoria de insubsistencia de Manifiesto de Impacto Ambiental, es decir se requerirá, en la pretendida elaboración de un nuevo Manifiesto, que se consulte, además de la Tribu Yaqui, a los municipios y al millón habitantes del Sur de Sonora que dependen de las aguas del Río Yaqui.
En su momento, miembros del Movimiento Ciudadano presentamos recursos de queja en contra del MIA, dice Rosas, y los tribunales nos acaban de contestar que dichos recursos no son necesarios en vista de que la Suprema Corte dejó sin efecto dicho manifiesto. Por lo tanto reafirma el ex alcalde de Cajeme: “para todo efecto legal ese manifiesto no existe, por lo mismo, la elaboración de uno nuevo pasa no solo por la consulta a los Yaquis, sino también a todo el Sur de Sonora”.
Para terminar dice: “siempre será mejor confiar en la ley, que en los llamados acuerdos”.
Respetar la ley, quiere decir, explica Rosas, que PROFEPA ya debería de haber notificado al gobierno de Sonora que la obra del acueducto, carece, por sentencia de la Corte, de Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA). La consecuencia administrativa y legal, es que la operación y construcción del acueducto se debe de detener, sin mayor mediación, más cuando sabemos que la Ciudad de Hermosillo, puede superar su emergencia estacional con otras acciones de abastecimiento de agua.
El Movimiento Ciudadano por el Agua, no va renunciar a la exigencia de que se respete la ley, afirma Rosas López, y luego sentencia: no vamos cambiar nuestra convicción de que se proceda de acuerdo a Derecho, avalando presuntos acuerdos y promesas de un gobierno que nos ha atropellado y que ha desacatado al Poder Judicial de la Federación.
Nosotros vamos a la ofensiva, dice con optimismo el líder del Movimiento Ciudadano por el Agua: “el amparo otorgado por la Suprema Corte a la Tribu Yaqui, es una acción legal que nos protege a todos”, eso es lo que quiere decir, explica, la declaratoria de insubsistencia de Manifiesto de Impacto Ambiental, es decir se requerirá, en la pretendida elaboración de un nuevo Manifiesto, que se consulte, además de la Tribu Yaqui, a los municipios y al millón habitantes del Sur de Sonora que dependen de las aguas del Río Yaqui.
En su momento, miembros del Movimiento Ciudadano presentamos recursos de queja en contra del MIA, dice Rosas, y los tribunales nos acaban de contestar que dichos recursos no son necesarios en vista de que la Suprema Corte dejó sin efecto dicho manifiesto. Por lo tanto reafirma el ex alcalde de Cajeme: “para todo efecto legal ese manifiesto no existe, por lo mismo, la elaboración de uno nuevo pasa no solo por la consulta a los Yaquis, sino también a todo el Sur de Sonora”.
Para terminar dice: “siempre será mejor confiar en la ley, que en los llamados acuerdos”.